Cómo evitar hackeos en dispositivos inteligentes del hogar y proteger tu privacidad

La domótica nos ha hecho la vida más fácil: luces que se encienden solas, termostatos que regulan la temperatura y cámaras de seguridad que nos alertan en caso de actividad sospechosa. Pero, ¿qué pasa cuando estos mismos dispositivos se convierten en una puerta de entrada para los ciberdelincuentes?

Proteger los dispositivos inteligentes de nuestro hogar es fundamental para evitar hackeos y asegurar nuestra privacidad. A continuación, te explico las mejores prácticas para mantener tu hogar inteligente seguro.

Usa contraseñas seguras y únicas

Uno de los errores más comunes es dejar la contraseña por defecto en los dispositivos inteligentes. Estas credenciales predeterminadas son la primera puerta de acceso para los hackers.

Elige una contraseña única y compleja para cada dispositivo. Usa combinaciones de letras, números y caracteres especiales.
Evita contraseñas obvias como “123456”, “admin” o “password”. Sí, aunque parezca increíble, muchas personas siguen usándolas.
Utiliza un gestor de contraseñas para no tener que recordarlas todas y mejorar tu seguridad.

Actualiza el firmware de tus dispositivos con regularidad

Los fabricantes lanzan actualizaciones de software para corregir vulnerabilidades de seguridad. Si no las instalas, dejas abiertas puertas que los hackers pueden aprovechar.

Activa las actualizaciones automáticas siempre que sea posible.
Si tu dispositivo no recibe actualizaciones desde hace mucho tiempo, considera reemplazarlo por uno más seguro.

Cambia las configuraciones predeterminadas

Los dispositivos inteligentes suelen venir con configuraciones predeterminadas que no siempre son las más seguras.

Desactiva funciones que no necesites, como el acceso remoto o la conexión desde redes públicas.
Configura niveles de seguridad avanzados, como la autenticación en dos pasos si está disponible.

Usa una red Wi-Fi separada para tus dispositivos inteligentes

Una estrategia efectiva es crear una red Wi-Fi exclusiva para la domótica del hogar. De esta manera, si un dispositivo es vulnerado, el hacker no tendrá acceso a tus computadoras o móviles personales.

Crea una red Wi-Fi para los dispositivos del hogar inteligente y otra para tu uso personal.
Usa protocolos de seguridad robustos como WPA3 para proteger tu red.

Desactiva las funciones de acceso remoto si no las necesitas

El acceso remoto puede ser útil en ciertas ocasiones, pero si no lo usas con frecuencia, es mejor desactivarlo. ¿Realmente necesitas poder controlar tu bombilla desde el otro lado del mundo? Probablemente no.

Accede a las configuraciones de cada dispositivo y desactiva el control remoto si no es imprescindible.
Si necesitas acceso remoto, usa una VPN en lugar de conexiones abiertas a Internet.

Evita comprar dispositivos de marcas desconocidas

El mercado está inundado con dispositivos baratos de fabricantes poco conocidos. Sin embargo, muchos de estos productos no tienen medidas de seguridad adecuadas y pueden ser un blanco fácil para los hackers.

Elige marcas con buena reputación y que ofrezcan actualizaciones de seguridad frecuentes.
Lee opiniones y busca información sobre la seguridad de cada dispositivo antes de comprarlo.

Monitorea la actividad de tus dispositivos

No esperes a que algo malo pase para dar el siguiente paso. Revisar periódicamente el tráfico de tus dispositivos puede alertarte sobre posibles ataques.

Configura alertas para detectar accesos sospechosos.
Revisa los registros de actividad de tu router para identificar conexiones inusuales.

Utiliza autenticación en dos pasos siempre que sea posible

La autenticación en dos pasos añade una capa adicional de seguridad. Incluso si alguien consigue tu contraseña, necesitarán un segundo método de verificación para acceder.

Activa esta función en aplicaciones y dispositivos que lo permitan.
Utiliza aplicaciones de autenticación en lugar de recibir códigos por SMS, ya que estos pueden ser interceptados.

Apaga dispositivos que no estés usando

Puede parecer algo obvio, pero muchos hackers aprovechan dispositivos que permanecen encendidos sin necesidad. Si tienes un asistente de voz o una cámara que no usas con frecuencia, apágala cuando no sea necesaria.

Desconecta dispositivos que no utilices regularmente.
Configura temporizadores para que ciertos dispositivos se apaguen automáticamente.

Ser consciente es la mejor defensa

La seguridad en el hogar inteligente no es algo que se deba tomar a la ligera. Con unos simples ajustes y hábitos responsables, puedes disfrutar de la comodidad de la domótica sin exponer tu privacidad.

¿Has implementado alguna de estas medidas en tu hogar? ¡Cuéntanos en los comentarios y comparte tu experiencia!